IMCO reveló que México necesita nuevas tarifas que promuevan sistemas de agua más eficientes

Pese a que el 93% de los hogares mexicanos tiene acceso a agua entubada, 33.5% no cuenta con suministro diario.

A pesar de que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM) reconoce el acceso al agua potable como un derecho humano, en México no se garantiza un suministro de calidad. Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) de 2022, aunque el 93% de las viviendas tiene acceso a un suministro de agua entubada, el 33.5% no cuenta con acceso diario. Los estados con los mayores porcentajes de viviendas sin acceso diario al agua son Guerrero (77%), Morelos (76%) y Baja California Sur (74%).

El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ha realizado un análisis del sistema tarifario del agua potable en el país, examinando las tarifas en diferentes regiones, el proceso de tarifación en diversos sectores y su impacto en la población mexicana. A partir de este análisis, el IMCO ha propuesto una serie de medidas para modernizar y actualizar el sistema tarifario en México.

Un aspecto crucial de este problema son los esquemas de tarifas para el acceso al agua potable, que deben ser transparentes y equitativos. La tarifación del agua debe tener en cuenta consideraciones económicas, sociales y políticas. Tarifas excesivamente altas afectan negativamente el bienestar de los sectores más vulnerables de la población, mientras que tarifas demasiado bajas pueden perjudicar la calidad del servicio y la infraestructura, lo que también perjudica a la población más vulnerable.

El análisis identifica que el diseño e implementación de las tarifas carece de transparencia en términos de metodologías, criterios y acceso a la información. Además, los municipios carecen de sistemas modernos y eficientes que garanticen que las tarifas sean proporcionales al consumo y que faciliten el pago puntual por parte de los usuarios.

¿Cuánto pagan los mexicanos por agua potable?

El gasto medio mensual de los hogares en México destinado al servicio de agua potable asciende a $136.93. A pesar de que las tarifas del agua están subsidiadas, la mala calidad del suministro en ciertas zonas del país lleva a los mexicanos a gastar más en agua embotellada que en agua potable, con un promedio anual de alrededor de $3,575 por persona. En 2020, México lideró el consumo global de agua embotellada, con un promedio de 286 litros por persona, lo que representa cinco veces más que la media mundial.

Además, se deben considerar gastos adicionales, como la instalación y el mantenimiento de sistemas de purificación o los servicios de suministro mediante pipas.

En el sector comercial y de servicios, el precio mensual promedio del agua es de $188 por metro cúbico (m3); sin embargo, existe una considerable variación entre las distintas entidades federativas. Las tarifas más elevadas se observan en San Luis Potosí ($741.3) y Baja California ($597.9), mientras que las entidades con tarifas más bajas son Tlaxcala ($3.8) y Estado de México ($1.7).

En el ámbito industrial, las tarifas son más elevadas debido a los grandes volúmenes de consumo. Hidalgo ($891.5) y San Luis Potosí ($741.3) encabezan la lista de tarifas más altas en este sector, mientras que Tlaxcala ($18) y Nuevo León ($11) presentan las tarifas más bajas. En promedio, el precio mensual se sitúa en $266 por m3.

Los gobiernos estatales recaudan un promedio de $603 por habitante en concepto de suministro de agua potable. Esta recaudación también varía considerablemente según la entidad, oscilando desde $1,763 en Baja California hasta $70 en Oaxaca. La Ciudad de México lidera en términos de recaudación total, con $7,215 millones de pesos al año, mientras que Tabasco se encuentra en la parte inferior de la lista con $191 millones de pesos. Durante el año 2021 (el dato más reciente), se recaudaron $73,144 millones de pesos por concepto del derecho al suministro de agua.

La implementación de un nuevo sistema tarifario puede contribuir a abordar el problema de la escasez de agua, generando ingresos suficientes para mantener y mejorar la infraestructura hídrica y los servicios de suministro para toda la población. Este replanteamiento debe considerar las competencias de los gobiernos locales, al mismo tiempo que se establecen criterios transparentes y uniformes en colaboración con el Gobierno de México, con el objetivo de garantizar que el pago de las tarifas se traduzca en un servicio continuo y de alta calidad.

Por ello, el IMCO Propone una serie de recomendaciones de política pública que atienden la problemática del sistema tarifario del país:

• Mejorar los sistemas de información tarifaria por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). La Federación debe realizar anualmente la recolección de datos sobre tarifas, incluyendo metodologías y criterios considerados para su cálculo. Estos deben estar disponibles para la consulta pública.

• Fortalecer la planificación estatal del agua de modo que la recaudación tarifaria sea equitativa con el gasto, en coordinación con la Conagua y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Esto permitiría una recaudación más equitativa, para financiar adecuadamente los gastos y garantizar el acceso equitativo y sostenible al agua para todos los ciudadanos.  
• Fortalecer a los municipios para mejorar los sistemas de cobro y de monitoreo por parte de los estados y la federación (Conagua). Es importante capacitar periódicamente al personal encargado de la administración y gestión del sistema de agua potable en los municipios, para que puedan comprender y aplicar de manera eficiente los diferentes mecanismos de cobro. Esto incluye la capacitación tanto en aspectos técnicos, financieros, así como legales.