¡Hay tiro! Alfredo Zúñiga Hervert vs José Luis Romero Calzada
¡Ahora sí hay tiro, hay tiro! Alfredo “El Sorbetes” Zúñiga y José Luis “El Merolico” Romero se andan trenzando, echando más indirectas que ex ardida en Facebook. El siempre honorable coordinador de DAPAS se le llenó el buche de piedras y le lanzó un reto al Tecmol: que le demostrara un peso robado de la obra de la glorieta de la PASR.
Pero eso sí, solo esa obra, ¿eh? No se vayan a emocionar buscando en las otras, porque ahí sí el archivo ya pesa como niño dormido en fiesta.
Artistas desmienten Ricardo Gallardo y sus conciertos fake en la Fenapo
El Gober Alucín sigue sin decepcionar. Mientras el estado se desmorona como chicharrón remojado en Valentina, él se pasea por bodas de ricos. Fue el único gobernador que asistió a la reunión con Sheinbaum en avión privado y, como cereza en el pastel de mentiras, los artistas lo dejan en visto: Hombres G y el Palomazo Norteño desmintieron su participación en la Fenapo… lo que dice mucho del interés general y poco del suyo.
Nos quiere ver la cara de estúpidas. Y es que el marketing de este gobierno es tan bueno que hasta eventos imaginarios organizan.
Alumnas de la FEPZH fueron sorprendidas fumando ‘mota’ en hotel de San Luis Potosí
En Ciudad Valles, alumnas de la UASLP se fueron de viaje académico… pero terminaron en viaje astral. El olor a hierba santa alertó a un profe, quien, al puro estilo CSI, pidió revisar la habitación. Las chicas, bien valientes (y bien pachecas), aceptaron… y ándale: droga e instrumentos para el sabroso vicio.
Pero como ya se veían embarradas, aplicaron la vieja confiable: “¡Nos acosó, profe cochino!”. Aunque todo indica que fue puro cuento para zafarse. La universidad ya investiga, pero lo que es seguro es que esas no aprobaron Ética en la escuela.
¡Se cayó el cielo en Ciudad Valles! Fuertes lluvias colapsan las calles
Y para rematar la semana… ¡que se nos cae el cielo! Llovió con ganas en Ciudad Valles: las calles se convirtieron en ríos, los carros en lanchas y los peatones en náufragos. Hubo árboles caídos, locales inundados… hasta Starbucks, que apenas llegó a la ciudad, ya lo bautizó el mismísimo Tláloc: les llovió más adentro que afuera.
Muchas calles están tan destruidas que parecen zona de guerra, y los baches ya son pozos de los deseos. Pero eso sí, la actual administración ni actualizado tiene el Atlas de Riesgos y Catástrofes. Y si no fuera mucha molestia… ¿se podrían pedir unos 10 pesitos de infraestructura para la ciudad?
