El congresista federal Francisco Favela informó que casi medio millón de animales son abandonados cada año.
El diputado federal Francisco Favela Peñuñuri, perteneciente al Partido del Trabajo (PT), advirtió sobre una problemática alarmante basada en datos proporcionados por la Defensoría Animal. Según estas cifras, aproximadamente medio millón de animales de compañía son abandonados en las calles de nuestro país cada año.
Motivado por esta situación, el legislador presentó una propuesta para la adición de un sexto párrafo al artículo 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM). El objetivo de esta modificación es resguardar la integridad de las mascotas, estableciendo medidas y disposiciones que buscan prevenir y abordar el abandono de animales, consolidando así una mayor protección y atención hacia estos seres vulnerables en nuestra sociedad.
Por ejemplo, siete de cada 10 perros que son regalados en Navidad, Día de Reyes y San Valentín terminan en situación de abandono.
Francisco Favela Peñuñuri
En su propuesta legislativa, el parlamentario planteó la inclusión en la Constitución de la afirmación de que “todo animal o ser sintiente vivo posee derechos, por lo tanto, el Estado está obligado a proteger y a respetar y hacer respetar dichos derechos”.
Adicionalmente, expresó que el propósito fundamental de esta iniciativa es fortalecer el marco legal, eliminando posibles lagunas jurídicas. Al ser incorporada en la Constitución, se espera que esta declaración genere la formulación de leyes secundarias más sólidas, las cuales contribuirán a reforzar las medidas de cuidado y protección de los animales en todo el territorio de la República.
Es nuestra responsabilidad como legisladores crear y fomentar políticas relativas a la seguridad de los seres sintientes.
Francisco Favela Peñuñuri
El legislador del Estado de México argumentó que, a pesar de la existencia de leyes de protección animal, la falta de conocimiento y el menosprecio hacia estas normativas continúan llevando a las personas a maltratar y, en algunos casos, a causar la muerte de seres sintientes.