Los senadores señalaron que sufrir este tipo de violencia se traduce en el bajo rendimiento escolar, un mayor riesgo de desempleo y pobreza, entre otros riesgos.
Las comisiones unidas de Derechos de la Niñez y de la Adolescencia y de Estudios Legislativos Segunda han aprobado una reforma con el objetivo de combatir de manera efectiva cualquier forma de violencia contra menores, especialmente el abuso sexual.
Esta propuesta de reforma, que modifica los artículos 109 y 137 del Código Nacional de Procedimientos Penales, establece que, en caso de delitos cometidos contra personas menores de 18 años, el Ministerio Público aplicará las medidas urgentes de protección especial solicitadas por las procuradurías del ámbito federal y local, conforme a lo estipulado en la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Las comisiones, lideradas por la senadora Josefina Vázquez Mota y el senador Rafael Espino de la Peña, subrayaron la obligación del Estado mexicano y del Congreso de ajustar su marco normativo para prohibir y sancionar cualquier forma de violencia contra la niñez.
Se reconoce que la violencia tiene consecuencias graves para la salud y el bienestar de este sector, con costos sociales y económicos elevados que a menudo impactan negativamente en la vida de las víctimas. Entre estas repercusiones se mencionan el bajo rendimiento escolar, un mayor riesgo de desempleo y pobreza, así como la asociación con la pertenencia a pandillas o al crimen organizado.
Las comisiones resaltaron la advertencia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia sobre la generalización de la violencia contra los menores en todos los países de América Latina y el Caribe. Señalaron que durante los últimos seis años, los datos han evidenciado la frecuencia de la violencia física, emocional y sexual contra la niñez en el hogar, en las escuelas, en la comunidad y en línea.