Ciudadanos Observando señaló la falta de transparencia y altos costos en el proceso de compra de uniformes en el Cobach.
La organización Ciudadanos Observando recibió una denuncia ciudadana que pone en tela de juicio la conducta de la dirección del Colegio de Bachilleres de San Luis Potosí (Cobach), por el cambio en el modelo del uniforme escolar y la imposición de una única empresa para su elaboración a un costo desproporcionado de casi 3 mil pesos.
Para el presente ciclo escolar, los padres de familia fueron informados por la dirección de los Cobach sobre el cambio en el modelo del uniforme y se les aseguró que solo una empresa, Uniformes Educativos Potosinos, sería la encargada de su fabricación. Además, se les notificó que adquirir el uniforme era un requisito obligatorio para que sus hijos pudieran ingresar a la escuela, sin darles opción a elegir otras alternativas.
La denuncia señala que Uniformes Educativos Potosinos, ubicada en la zona centro de la capital potosina, presenta notables deficiencias en su servicio. Los padres de familia se encontraron con la falta de stock de tallas y uniformes, lo cual es inusual para una empresa que se dedica a la confección de uniformes escolares. Esta situación pone en evidencia una falta de previsión y seriedad por parte de la compañía.
Además, se reportó que la empresa no muestra el “nuevo diseño” del uniforme, limitando a los padres a adquirir el producto a ciegas. Para empeorar la situación, al momento de probar los uniformes, se entregan prendas prestadas de otras escuelas como muestras, con la promesa de que las tallas son similares. Sin embargo, estas tallas no corresponden, resultando en prendas demasiado grandes o pequeñas que obligarán a los padres a realizar gastos adicionales para ajustarlas.
En cuanto a la calidad de los materiales, los padres han expresado su preocupación, ya que, en las pruebas realizadas, se ha observado que son de baja calidad y no corresponden con los altos costos impuestos. Esta falta de transparencia en la calidad de los productos genera desconfianza entre los padres de familia.
Otra preocupación manifestada por los denunciantes es el hecho de que la empresa obliga a los padres a adquirir paquetes completos de uniformes, a pesar de que en su publicidad mencionan manejar precios unitarios. Esta práctica es considerada abusiva, ya que los padres no tienen la opción de comprar solo las prendas que necesiten.
Por otro lado, surge la pregunta sobre la forma de pago. La empresa solo acepta pagos en efectivo, lo cual ha generado sospechas sobre la posibilidad de evadir declaraciones ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
La denuncia también señala que la empresa ya ha recibido el pago completo por adelantado, lo que podría significar que no haya una motivación real para garantizar la calidad del producto y resolver cualquier problema que surja después de la compra.
Ante estas irregularidades, los padres de familia sienten que están siendo obligados a aceptar condiciones injustas e inequitativas impuestas por la dirección del Cobach. La falta de opciones, la imposición de una empresa y la falta de transparencia en el proceso de adquisición del uniforme escolar están generando un malestar significativo entre la comunidad estudiantil y sus familias.
