La iniciativa busca combatir la obesidad y fomentar hábitos alimenticios saludables en México.

Con el objetivo de asegurar el derecho a la alimentación nutritiva y saludable de los menores de edad, tal como está contemplado en la Constitución y en la Declaración de los Derechos del Niño, la diputada Ana Laura Bernal Camarena del Partido del Trabajo (PT) está promoviendo reformas a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.

La propuesta busca modificar el artículo 13 de esta ley en sus fracciones XIX y XX, así como agregar una nueva fracción XX. También se pretende incluir un Capítulo Vigésimo Primero titulado “Del derecho a la alimentación nutritiva y saludable”.

El artículo 101 Ter establecerá que las “niñas, niños y adolescentes tienen derecho a la alimentación nutritiva y saludable”. Mientras que el artículo 101 Quáter hará referencia a que “las autoridades, en coordinación con el sector salud, promoverán programas de alimentación nutritiva y saludable dirigidos especialmente a aquellos menores que padecen de obesidad, sobrepeso y otros trastornos alimenticios”.

Adicionalmente, el artículo 101 Quinquies establecerá la prohibición del comercio, venta y suministro de bebidas azucaradas y alimentos envasados con alto contenido calórico en establecimientos comerciales o mercantiles, máquinas expendedoras, puestos fijos o semifijos, a menores de edad.

La legisladora Bernal Camarena resaltó la importancia de esta iniciativa, argumentando que el consumo diario o excesivo de refrescos y bebidas azucaradas es altamente perjudicial y pone en riesgo la salud y vida de los niños y adolescentes, quienes se encuentran en pleno desarrollo y son un grupo vulnerable en la sociedad.

Asimismo, destacó que es necesario proteger jurídicamente su bienestar y salvaguardar sus derechos, garantizando principios pro persona y el interés superior del menor de forma progresiva. La propuesta se fundamenta en que el derecho a recibir una alimentación nutritiva es universal, interdependiente, inalienable e indivisible, por lo que el Estado tiene la responsabilidad de garantizar una alimentación adecuada y sana para los menores.

En sus argumentos, la congresista del PT citó datos alarmantes sobre la situación de sobrepeso y obesidad en México. Según el Congreso Internacional Avances en Medicina (CIAM) de 2019, tres de cada diez niños de cinco y 11 años, así como cuatro de cada diez de 12 a 16 años, padecen sobrepeso u obesidad. La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2016 también reveló que el porcentaje de jóvenes de 12 a 19 años con sobrepeso y obesidad aumentó al 36.3%, superando el 34.9% registrado en 2012.

Para abordar este problema, se implementó un impuesto especial a la venta de bebidas azucaradas en 2014, con el objetivo de reducir su consumo debido a los efectos negativos en la salud. Además, se prohibió la venta de comida chatarra en las escuelas y se aprobó un nuevo etiquetado frontal en alimentos y bebidas para advertir sobre su contenido nutricional y los riesgos para la salud en caso de un consumo excesivo.

La propuesta presentada por la diputada fue remitida a la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia de la Cámara de Diputados del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos para su análisis y dictamen.

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